Sunday, March 25, 2012

Remember this Face


La próxima vez que hable de “maricones”, “fletos”, “mariposones” o cualquier otro nombre que por estos días se use para insultar a las personas gay, espero que recuerde este post.
La próxima vez que se ría con algún humorista o animador de televisión que doblando su muñeca y agitando sus pestañas se burla de los homosexuales, espero que recuerde estas caras.
Son las caras del odio. Y el odio, ya sabemos, viene envuelto de muchas formas.
A veces es obvio, como cuando un neonazi marca con una botella quebrada una swástica en el cuerpo de un joven gay.
Otras es solapado y encubierto, como cuando entre risitas dos oficinistas se burlan de un tercero solo porque asumen que es gay. O cuando un honorable diputado de la República, como el diputado Enrique Estay en Chile, utiliza sin problemas la palabra “maricón” porque, según él, es una palabra que no tiene una connotación odiosa. Es solo un decir, un término de uso general. Y el resto de los honorables congresistas, en siniestra cofradía, le da toda la razón.
¿Que dirá el honorable diputado ahora que Daniel Zamudio, un gay de 24 años atacado ferozmente por un grupo de neonazis homofóbos, permanece cerebralmente muerto en una cama de hospital? ¿Qué dirán sus amigos, que le dieron pase libre en el Congreso?
¿Hablaran del maricón? Así, con todo respeto.
¿Qué dirá la iglesia, tan ciega a sus defectos y tan atenta a los del resto? ¿Dirán una vez mas que hay que perdonar al pecador pero no el pecado?
De todos los cómplices de la homofobia, sin embargo, no hay ninguno mayor que el silencio.
Un neonazi puede ser encarcelado, un cura dogmático o un congresista matón pueden ser enfrentados, ¿pero una sociedad silenciosa, que oculta sus virulentos prejuicios detrás de una careta amable y civilizada? ¿Cómo se enfrenta eso?
Aquí va un intento.

JAMEY RODMEYER

Jamey, un adolescente gay de 14 años, se suicidó en Buffalo, NY, después de un año de bullying on line.
“JAIME ES ESTUPIDO, GAY, GORDO Y FEO. DEBE MORIR!!”, fue el post de uno de sus abusadores.

LARRY KING

Larry, un niño gay de 15 años de California, recibió una bala en la cabeza durante su clase de biología.
Su asesino, Brandon McInerney, de 17, le disparó porque no le gustaba la forma en que Larry se vestía ni como “interactuaba” con él.

PHILLIPE PARKER

Phillip Parker, un adolescente de 14 años de Tennessee, se suicidó después de meses de bullying en el colegio.
Sus padres lo encontraron colgado de una soga en el baño.
En el tarro de basura había una nota arrugada que decía “Mamá, ayúdame por favor”.

ERIC JAMES BORGES

Eric se suicidó en Enero de este año, a los 19.
Sus padres, cristianos fundamentalistas en California, lo sometieron a un exorcismo y luego lo expulsaron de la casa por ser gay.
En el colegio, fue física y verbalmente abusado durante años.
Antes de morir dejó una nota donde agradecía a sus amigos por su amor y apoyo, y a Lady Gaga por su solidaridad con la comunidad gay.

JAMES HUBLEY

James se suicidó en Octubre del 2011, a los 15 años
Su abuso en el colegio comenzó en séptimo grado, cuando sus compañeros lo hicieron tragar pilas después de enterarse de que pensaba formar parte del equipo de patinaje en hielo.
En su nota de suicidio, declaró su amor por Lady Gaga, Adele, Katy Perry y Christina Aguilera.
Luego agregó: “Estoy cansado de esta vida. Ya no la soporto. No quiero que mis padres sientan que es culpa de ellos. Amo a mi mamá y mi papá. Pero es demasiado duro. No quiero esperar tres años mas, duele demasiado”.

MATTHEW SHEPARD

Matthew Shepard fue asesinado en Octubre de 1998, a los 22 años, en Laramie, Wyoming.
Después de una noche en un bar, sus asesinos- que detestaban a los gays, según dijeron en el tribunal- le ofrecieron llevarlo a su casa. En cambio lo trasladaron a un campo vacío, lo torturaron, le robaron, y lo dejaron inconsciente amarrado a una cerca.
Un ciclista lo encontró 18 horas después.
En un principio lo confundió con un espantapájaros.
La muerte de Matthew influyó en la aprobación de la ley de “hate crimes” contra personas gay en Estados Unidos.

JASON MATTISON

Jason murió el 10 de Noviembre del 2009, a los 15 años, en un departamento en Baltimore.
Su asesino, un hombre de 37, le puso una almohada en la boca, intentó violarlo, y cuando Jason pidió auxilio, le corto el cuello con un cortaplumas.
Jason estaba viviendo con su tía, una adicta a la heroína, después de haber sido expulsado de la casa de sus padres por ser gay.

ABDELLAH TAÏA

Abdellah, un escritor marroquí de 36 años radicado en Francia, describió en las páginas de The New York Times esta semana el abuso que sufrió durante su niñez.
“Tenia apenas 12 años, y en mi barrio ya me llamaban ‘la niñita’”, cuenta. “Mi cuerpo estaba creciendo, me estaba convirtiendo en hombre, pero el resto no me veía como un hombre. Los intentos de violación y abuso se multiplicaron, y llegaron a su punto máximo una noche de verano en 1985 cuando escuché la conocida voz de los hombres borrachos.
Todos la escuchamos. Toda mi familia. Todo mi barrio. Todo el mundo.
Estos hombres, a los que conocíamos bien, gritaron “Abdellah, niña, baja a vernos. No tengas miedo. No te haremos daño. Despierta y baja. Todos te buscamos. Solo queremos tener sexo contigo”.
Mi hermano, el monarca absoluto de mi familia, no hizo nada. Todos me dieron la espalda. Todos me mataron esa noche”.

2 comments:

naked said...

El silencio es el gran cómplice de estos casos, hay que enseñar a los chicos el respeto hacia lo diverso.

Anonymous said...

Después de leer tu post hice una reflexión de cuánta culpa tenemos como sociedad de la muerte de Daniel. Te dejo el link:
"Todos matamos a Daniel" http://www.facebook.com/notes/carola-moya-ortega/todos-matamos-a-daniel/10150687462021988